
Nadie notaría que he desaparecido, ¿verdad?
When you were sleeping on the sofa
I put my ear to your ear and listened
to the echo of your dreams.
That is the ocean I want to dive in,
merge with the bright fish,
plankton and pirate ships.
I walk up to people on the street that kind of look like you
and ask them the questions I would ask you.
Can we sit on a rooftop and watch stars dissolve into smoke
rising from a chimney?
Can I swing like Tarzan in the jungle of your breathing?
I don't wish I was in your arms,
I just wish I was peddling a bicycle
toward your arms.
The Secret, Jeffrey McDaniel
Primero, tenemos las relaciones de izquierda, las cuales creen que el ser humano es capaz de vivir simplemente basadas en un nexo moral, y que los contratos sociales son limitaciones que deforman a las personas, porque el orden realmente debería ser producto de la interacción y la satisfacción mutua de necesidades, y no del miedo a las iras celotípicas o a los castigos producto de las malas acciones.
Por el otro lado, tenemos las relaciones derechistas. Estas se basan en la premisa de que el ser humano es incapaz de hacer las cosas bien por su cuenta y simplemente por el hecho de que así deben ser; espera que los contratos sociales le recuerden día a día y noche a noche sobre sus obligaciones. Ya sea por medio de un contrato verbal, escrito, un ícono o el involucramiento del entorno social, siempre habrá algo que nos recuerde lo que está bien y mal. Y que habrá consecuencias en caso de salir con la otra.